1- El número de mi casa es el 1461 y quiero colocarlo en una pieza de plástico transparente en la puerta de mi casa, de manera que se vea de ambos lados y siga mostrando el número correcto sin necesidad de escribirlo dos veces.
Solución: consiste en usar números romanos: I IV VI I 1 4 6 1
2- La NASA planeaba mandar canarios al espacio para estudiarlos en condiciones de gravedad cero. Sin embargo, el proyecto tuvo que ser suspendido cuando alguien se dio cuenta que aún teniendo agua de sobra los canarios se morirían de deshidratación en pocas horas.¿Por qué?
Solucion A diferencia de los seres humanos, los pájaros necesitan de la gravedad para tragar. Los seres humanos, en cambio, podemos tragar inclluso cabeza abajo.
3- Juan Pistolas vio su cara en un cartel pegado en un árbol. El mismo decía “Buscado, vivo o muero”, y más abajo “Recompensa: __________ Dólares”
Había una cifra de tres dígitos en el cartel. Juan sacó su pistola y disparó al primer número (en la columna de las centenas).De ese modo, redujo la recompensa en cinco veces.
Juan volvió a apuntar, y le dio al segundo número (en la columna de las decenas).Así, volvió a disminuir el precio por su cabeza otras cinco veces.
¿Cuál era la recompensa inicialmente ofrecida por la cabeza de Juan Pistolas?
Solución: La recompensa era de 125 dólares.
Si se borra el 1 queda 25, que es la quinta parte de la cifra original.
Si luego borra el 2 quedará 5, la quinta parte de 25.
sábado, 23 de mayo de 2009
HISTORIA PARA PENSAR
Una pareja de jóvenes tenía varios años de casados y nunca pudieron tener hijos. Para no sentirse solos, compraron un cachorro pastor alemán y lo amaron como si fuera su propio hijo. El cachorro creció hasta convertirse en un grande y hermoso perro; salvó en mas de una ocasión a la pareja de ser atacada por ladrones. Siempre fue muy fiel, quería y defendía a sus dueños contra cualquier peligro.
Luego de siete años de tener al perro, la pareja logró tener el hijo tan ansiado. La pareja estaba muy contenta con su nuevo hijo y disminuyeron las atenciones que tenían con el perro. Este se sintió relegado y comenzó a sentir celos del bebé y ya no era el perro cariñoso y fiel que tuvieron durante siete años.
Un día la pareja dejo al bebé plácidamente durmiendo en la cuna y fueron a la terraza a preparar una carne asada. Cuál no fue su sorpresa cuando se dirigían al cuarto del bebé y ven al perro en el pasillo con la boca ensangrentada, moviéndoles la cola. El dueño del perro pensó lo peor, sacó un arma que llevaba y en el acto mató al perro. Corre al cuarto del bebe y encuentra una gran serpiente degollada. El dueño comienza a llorar y exclama: ¡he matado a mi perro fiel.
¿Cuántas veces hemos juzgado injustamente a las personas? Lo que es peor, las juzgamos y condenamos sin investigar a que se debe su comportamiento, cuáles son sus pensamientos y sentimientos. Muchas veces las cosas no son tan malas como parecen, sino todo lo contrario. La próxima vez que nos sintamos tentados a juzgar y condenar a alguien recordemos la historia del perro fiel, así aprenderemos a no levantar falsos contra una persona hasta el punto de dañar su imagen ante los demás.
ILUSIONES OPTICAS
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